Fuga de aire en el manómetro, mala inmersión.

En este breve post vamos a comentar una historia que presenciamos hace ya mucho tiempo, cuando una compañera de inmersión tenía una pequeña fuga de aire en su manómetro. No recuerdo muy bien cuándo fue pero no llevábamos muchas inmersiones tras nuestro primer curso de buceo.

La historia transcurre en Gran Canaria, habíamos buceado varios días y una buena mañana de domingo continuábamos con nuestra inmersión, en la que buceamos con una chica de Asturias. Recuerdo que ella era una buceadora con mucha más experiencia que nosotros por aquel entonces.

Una fuga en el manómetro

Presentaciones, briefing en el barco, risas y comentarios acerca de los últimos buceítos realizados… lo típico y tradicional en el mundo buzo. Comprobamos los equipos antes de lanzarnos al agua por segunda vez (como es debido) y me doy cuenta de que el manómetro de esta chica hacía un pequeño silbido. Se lo comenté y me dijo que ya lo sabía, que no era nada; dijo que lo tenía que cambiar y que ya había pedido uno pero que le llegaba a Asturias. «No es nada, apenas suelta unas burbujitas. Pero no me voy a quedar sin aire, yo salgo con 90 o 100 bares de todas mis inmersiones»

Yo no tenía demasiada experiencia pero sí que sabía que no se debe bucear así. También sabía que no debes llevarte el manómetro a la oreja o a la cara y menos si hay una fuga ya que el cristal que cubre la consola te puede salir disparado hacia la cara; Pero bueno, parecía que lo tenía todo controlado y ya llevaba tres o cuatro buceos con su manómetro en ese estado.

El chico del centro de buceo le ofreció poner otro manómetro del centro o eso nos contó ella. Nos sumergimos todos y yo la llevaba detrás todo el tiempo ya que en aquellas primeras inmersiones siempre íbamos pegaditos al guía o instructor, pero cada vez que la miraba veía esas burbujitas saliendo de su manómetro continuamente. La verdad, que no era gran cosa, no creía que esas burbujas llegaran a hacer diminuir de posición la aguja del manómetro.

El tema es que tampoco deberíamos fiarnos del marcaje de un manómetro en esas condiciones. Pasados diez o quince minutos de buceo por un fondo rocoso espectacular veo al guía que sale como un torpedo para atrás, nos giramos y lo vemos compartiendo aire con esta chica y nos indica el fin de la inmersión y el inicio del ascenso. No sabíamos que había ocurrido, aunque yo deduje que ese manómetro habría reventado.

En la teoría del primer curso de buceo hablamos sobre los diferentes elementos del equipo y sus cuidados.

En superficie todo normal, una inmersión cortita a causa de la irresponsabilidad de bucear con el equipo en mal estado. Arriba el instructor nos corroboró el problema. Ese manómetro había saltado por completo a causa de la fuga de aire y claro, este elemento del equipo va unido a la cámara de alta presión de la primera etapa, lo que quiere decir que te quedas sin aire en poco tiempo (una botella a 200 bares se vacía rápidamente) y por ello el fin de la inmersión.

Ella tenía experiencia, no pareció afectarle para nada, había risas y bromas con el tema mientras volvíamos a puerto. Para nosotros fue la primera vez que veíamos un ascenso de emergencia, compartiendo el aire de una a otra persona, en un caso real. Nos marcó bastante, nos «fastidio el buceo» de esa mañana (aunque nos regalaron otra inmersión al día siguiente) pero, sobre todo, nos corroboró la teoría desde bien temprano: no se bucea con fugas, por pequeñas que parezcan.

En este otro post podrás conocer los problemas que tuve con la máscara de buceo. Experiencias negativas que siempre suman.

Y tu… ¿has vivido o visto otra situación similar? Seguro que si. ¿Quieres comentarla?

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