Muchos trajes de buceo vienen con su correspondiente capucha pero a veces, según la marca, el tipo de traje o el modelo debemos adquirir nuestra capucha de neopreno por separado. También es posible que necesitemos adquirir una capucha de neopreno porque hemos perdido la nuestra, se nos olvidó en el barco del último viaje de buceo o la hemos estropeado a base de clavarle las uñas.
En cualquier caso, desde buceitos.com siempre recomendamos el uso de la capucha de neopreno en nuestras inmersiones.
¿Por qué usar capucha de neopreno cuando buceamos?
Los buceadores y buceadoras tenemos, en principio, dos razones por las que usar este elemento del equipo. ¡Veamos!
La temperatura corporal
Como ya sabes, desde tu primer curso de buceo, por donde más calor corporal perdemos al estar sumergidos y sumergidas en el agua es por las extremidades y la cabeza. Por ello si buceamos con una capucha de neopreno estaremos mucho más protegidos y protegidas frente a la perdida de calor corporal bajo el agua.
No tiene mucho sentido bucear con un traje seco, semiseco o húmedo de 7 u 8 milímetros y no usar nuestra capucha de neopreno. Es decir, normalmente cuando la temperatura del agua es inferior a los 22º bucearemos con mayor confort si nos hacemos con nuestra capucha de buceo. También hay diversos grosores como ocurre con los trajes pero lo más usual es encontrar capuchas de 2, 3 o 5 milímetros.
Es conveniente seleccionar el grosor de la capucha en función del tipo de inmersiones y de la temperatura del agua en la que más solamos bucear. No obstante, como no se trata de una gran inversión económica muchas personas prefieren tener dos capuchas de buceo: una más fina y cómoda y otra más gruesa y protectora ante la pérdida de calor.
El entorno subacuático
Aunque la mayoría podamos pensar que el uso de la capucha se debe al frío durante las inmersiones, debemos tener en cuenta que no es así.
La capucha de neopreno también nos protege del entorno subacuático. En aguas turbias, sucias o contaminadas seguramente preferiremos minimizar el contacto de nuestra piel y oídos con el agua. Otra situación en la que podemos echar de menos nuestra capucha de buceo es cuando notamos un extraño picor en la cara, de repente, en algunas inmersiones. ¿No lo has notado nunca?
Aunque estemos buceando en las aguas más cálidas y cristalinas del planeta, a veces puede ocurrir: una corriente trae pequeñas medusas u otros organismos que tienen poder urticante para nosotros. Muchas veces ni siquiera podremos verlos pero si notaremos un picor o ligera molestia en la frente o nuestras mejillas. Algo que a penas percibiremos si llevamos nuestra capucha de neopreno.
La capucha de neopreno nos protege del contacto con el agua, no sólo de la pérdida de calor corporal que supone estar sumergidos en ella.
Lo que debes tener en cuenta sobre tu capucha de neopreno
Recuerda siempre antes de sumergirte que debes colocar los faldones de tu máscara por dentro de los bordes faciales de la capucha de neopreno. De lo contrario entrará agua en tu máscara nada más empezar la inmersión.
Solapar perfectamente la capucha con el cuello del traje ayuda a que nos entre menos agua por esta parte del traje. De este modo minimizamos la pérdida de calor corporal durante la inmersión al tener otro elemento más para eliminar el flujo de agua circundante al interior del traje de buceo.
Ajustar perfectamente la capucha a nuestra cabeza, elegir capuchas que lleven una pequeña perforación en la parte superior para eliminar el aire o recordar vaciar el aire que se acumula en la capucha, mientras buceamos. A veces el aire que exhalamos durante la inmersión se introduce dentro de la capucha; lo que nos da una flotabilidad positiva extra además de resultar muy incómodo.
Ten siempre a mano tu capucha de buceo. Es un elemento que solemos olvidar cuando nos ponemos y quitamos el equipo. En todos los centros de buceo el producto estrella en objetos perdidos suele ser la capucha. Recuerda que puedes unirla a tu traje mediante pequeños mosquetones o acostúmbrate a guardarla siempre en el interior de algún bolsillo del traje o del chaleco cuando te la quites de la cabeza.
Recuerda que debe entrar algo de agua cuando comiences la inmersión. A veces ajustan tan perfectamente que pueden resultar un impedimento para compensar bien alguno de nuestros oídos al descender. Debes acostumbrarte a tu nueva capocha de buceo y por ello en las primeras inmersiones presta atención a la hora de compensar tus oídos en los descensos.
Finalmente debes pensar que se trata de otro elemento más de neopreno en tu equipo de buceo. Es por ello que al terminar tus inmersiones debes recordar endulzarlo y secarlo correctamente, sin dejarlo expuesto directamente al sol, como el resto de elementos de tu equipo. Es todo el mantenimiento que necesitará tu nueva capucha de buceo.
Veamos ahora lo referente a otro elemento del equipo: los escarpines de buceo.