Si deseas conocer toda la información acerca de los trajes de buceo, ésta es tu web.
Vamos a ver los diferentes tipos de traje según sus usos y calidades. También analizaremos las ventajas e inconvenientes que debemos tener en cuenta antes de comprar nuestro traje de buceo y descubriremos las claves del mantenimiento y los cuidados que hemos de brindar a nuestro traje.
En buceo hemos de estar bien protegidos de la pérdida de calor corporal que sufrimos al estar sumergidos. El agua es mucho más densa que el aire y mejor conductora térmica. Por ello nuestro cuerpo pierde calor veinte veces más rápido cuando estamos bajo el agua. Es el motivo principal por el que necesitamos nuestro traje de buceo.
Trajes de buceo según su uso
Existen diferentes tipos de trajes de buceo según el uso que les vayamos a dar. No elegiremos el mismo traje de buceo si pretendemos bucear en las aguas del Atlántico Norte o en un frío lago de Islandia, que si vamos a sumergirnos en el Mar Caribe. La temperatura del agua influye en la velocidad con la que ésta absorbe nuestro calor corporal.
Parece obvio pero en numerosas ocasiones desconocemos qué traje de buceo debemos elegir.
Elegiremos el traje de buceo en función de nuestras necesidades, las inmersiones que vayamos a realizar, la calidad que deseemos y el presupuesto que le queramos dedicar.
La temperatura del agua donde vayamos a bucear y por tanto, la zona climática donde se encuentren nuestros puntos de inmersión preferidos.
El tipo de buceo que practiquemos y por ende el tiempo, la profundidad y el número de inmersiones que hagamos.
La comodidad con la que queramos bucear, que se traduce siempre en la practicidad de nuestras inmersiones y también en la seguridad.
Recuerda que el frío durante una inmersión es un agravante a tener en cuenta, a efectos de reducir el riesgo de enfermedad descompresiva.
Puedes recordar la teoría de tu primer curso de buceo acerca de la temperatura aquí y ahora
Ventajas e inconvenientes de los trajes de buceo de neopreno
Antes de elegir el traje de neopreno más apropiado para bucear debemos poner atención a algunos aspectos clave. Ello nos hará acertar perfectamente en nuestra decisión de compra, bucear cómodamente según las necesidades que tenemos y ajustar nuestro presupuesto a lo que realmente deseamos.
El grosor del neopreno
Existen en el mercado diferentes tipos de neopreno según el grosor, que puede ir desde el medio milímetro hasta el centímetro. Normalmente se emplean los trajes más finos para actividades como el buceo en apnea, la natación y la pesca submarina. También se usa este tipo de neopreno para otras actividades donde no hay que permanecer sumergidos demasiado tiempo, como por ejemplo el surf.
En buceo recreativo solemos emplear trajes de neopreno que pasan por los tres, cinco, siete y hasta ocho milímetros. Estos espesores son los más usados y por consiguiente los que más vemos en el mercado actual.
A más grosor, mayor será la protección térmica de nuestro traje de buceo. En cambio, cuanto menor sea el grosor de nuestro de traje nos será más cómodo a la hora de equiparnos, nos brindará una mayor sensación de libertad de movimiento y sobre todo, nos proporcionará menor flotabilidad positiva (necesitaremos menos lastre).
Todo depende de nuestras preferencias, pero recuerda que el frío durante una inmersión puede ser una gran incomodidad. Además la pérdida de calor corporal podría convertirse en hipotermia, lo que podría derivar en consecuencias nada deseables. Es por ello que basaremos nuestra elección según las necesidades térmicas de las inmersiones que realicemos con más frecuencia. A fin y al cabo es la misión del traje de buceo.
- Reserva los trajes de neopreno de 2 y 3 milímetros para inmersiones en aguas cálidas, zonas ecuatoriales, tropicales y subtropicales en verano. En realidad, para inmersiones de más de 45 minutos, la protección que ofrecen estos grosores es muy escasa en otras situaciones de buceo.
- Los neoprenos de 5 milímetros son los más usados en la mayoría de situaciones. Ofrecen una buena protección térmica para la mayoría de inmersiones cuando el clima es bueno en las zonas subtropicales y templadas. Para aguas que se mantienen entre 23 y 25 grados ofrecen una protección térmica perfecta.
- Los trajes de buceo más gruesos de 7 y 8 milímetros son necesarios en aguas que se mantienen en torno a los 20 grados. No obstante, muchas personas por debajo de los 22 grados prefieren optar ya por un traje seco o semiseco.
El número de inmersiones y el tipo de buceo que practicamos con mayor frecuencia, también son variables a tener en cuenta
Por ejemplo, podemos ir muy cómodos con un traje de buceo de 5 milímetros en aguas a 24 grados. Pero si vamos a realizar dos o tres inmersiones, quizás echaríamos de menos un traje de 7 milímetros en la última inmersión. Del mismo modo, podemos ir muy bien con nuestro traje de 8 milímetros para un buceíto en aguas a 21 grados. Pero si hacemos un buceo profundo y la temperatura baja dos grados, quizás hubiésemos preferido un semiseco o un seco al final de la inmersión.
El cierre principal del traje
Existen muchos trajes que tienen el cierre principal en la parte frontal, otros lo tienen en la parte trasera. Del mismo modo hay trajes que tienen su cremallera principal en sentido vertical y otros que la colocan de forma horizontal, de hombro a hombro. También hay cierres principales de cremalleras diagonales, en cuyo caso la cremallera va de un lado de la cintura al hombro contrario.
Al final se trata de gustos. Puedes preferir abrocharte sin ayuda y asegurándote de que la cremallera nunca se queda trabada o puedes preferir una mejor sensación en tu parte frontal a costa de necesitar algo de ayuda para abrocharte. Cuando el cierre principal se ubica en la espalda facilita la entrada de agua cuando movemos la cabeza hacia detrás. Si el cierre longitudinal se encuentra en la parte frontal del traje de neopreno, facilita nuevas entradas de agua cuando movemos la cabeza hacia abajo.
Normalmente los cierres horizontales y diagonales garantizan una menor entrada de agua aunque puedan parecer más incomodos de manipular. Se suelen usar más en los trajes secos y semisecos aunque en la actualidad, hay también trajes húmedos con este tipo de cierres. En cambio nos equiparemos con mayor rapidez y comodidad cuando los cierres de cremallera sean verticales.
El número de cremalleras
Casi todos los trajes de neopreno llevan como mínimo tres cremalleras: la del cierre principal y dos para cerrar la zona inferior de las piernas, por debajo de nuestros gemelos. También hay muchos trajes de buceo con cierres en la zona de las muñecas y otros que únicamente llevan la cremallera principal.
Debemos tener en cuenta que las cremalleras en las extremidades facilitan mucho la tarea de ponernos y quitarnos el traje de neopreno. Además, suelen permitir un mejor ajuste del traje con el paso del tiempo, cuando el neopreno va perdiendo elasticidad al envejecer.
También puedes valorar más o menos estas cremalleras en función del uso de calcetines y guantes.
Los bolsillos en el traje de buceo
A veces, podemos valorar la existencia de bolsillos en nuestro traje de neopreno dependiendo de las necesidades que tengamos a la hora de portar objetos en nuestras inmersiones. Hay personas que prefieren usar los bolsillos del chaleco, pero en algunas ocasiones puede resultarnos mucho más cómodo contar con los bolsillos del traje.
Algunos trajes de buceo tienen bolsillos con cierre de cremallera o velcro. La mayoría de marcas los suelen ubicar en la parte superior de una de las mangas o perneras del traje. Elegir uno de estos trajes dependerá únicamente de tus necesidades y gustos a la hora de bucear.
La talla más adecuada
Dada la configuración que elijas en tu traje de neopreno, uno de los aspectos fundamentales será escoger la talla adecuada. En la actualidad, todas las marcas existentes cuentan con multitud de opciones y además aportan una tabla muy exacta para elegir la talla correcta en base a nuestra complexión física y nuestras medidas, de modo que es muy difícil fallar.
Recuerda que tu traje de neopreno permite la entrada de agua, que ese agua se calienta enseguida y es la que ayuda a mantener nuestra temperatura corporal. Un traje de buceo que nos vaya grande parecerá mucho más cómodo pero permitirá que el agua caliente se reemplace, con mayor facilidad, con el agua fría circundante. Estaremos echando por tierra la función principal de nuestro neopreno de buceo.
El precio de nuestro traje de buceo
En el mercado contamos con trajes de neopreno de todos los precios, que van desde los 50 hasta los más de 1000 euros. La calidad del material, el grosor, el sistema de cierre, el número de cremalleras, accesorios como bolsillos y la existencia o no de refuerzos y forros son las variables que causan esta disparidad de precios.
Un traje de buceo es siempre una buena inversión. Disponer de tu propio traje de neopreno evita tener que contar con los trajes de alquiler, depender de otras personas, tener que usar otras tallas y te permitirá bucear siempre cómodo, con el ajuste adecuado y con el lastre justo y necesario.
No obstante, debes plantearte esta inversión en función del uso que le vayas a dar. Hay personas que si bucean dos o tres veces al año prefieren alquilar su traje de buceo en un centro de confianza. Otros buceadores y buceadoras prefieren tener su propio traje aunque únicamente lo usen en sus viajes vacacionales.
La verdad es que si ya llevas un tiempo buceando, disfrutas con ello y sigues pensando en bucear, el traje es una buena inversión siempre. Comodidad, higiene y ajuste perfecto son variables que justifican muy bien una inversión de entre 200 y 350 euros. En esta horquilla de precios podemos elegir entre un buen abanico de posibilidades con calidad, durabilidad, funcionalidad y garantía.
Ahora que ya estamos al tanto acerca de los trajes de buceo, vamos a analizar el siguiente material de neopreno que solemos usar en nuestras inmersiones, sobre todo cuando el agua está por debajo de los 22º. Hablaremos aquí de la capucha de buceo.